lunes, 7 de septiembre de 2009

T.O.T.B! - Franklin Dwayne, Jack Michael y los demás...

A estas horas pensaba que estaría escribiendo sobre la clasificación de la Selección al Mundial de Turquía 2010, de su impacto económico y su relevancia deportiva. Nada más lejos de una realidad que ahora depende del lobby y los favores.

Honestamente, debo reconocer que la selección de este año me había ilusionado. Pero siendo serio debo también expresar lo que en mi opinión hace que este resultado sea de todo, menos extraño e inesperado. Para corroborar mi opinión me valdré de dos variables cuantificables y verificables: la edad y la experiencia.

Con esto no quiero insinuar que por ser uno de los cinco primeros equipos clasificados, que ligeramente superaba la media de los demás vimos mermada nuestra capacidad; que tampoco la diferencia con Canadá (media, 3 años menor) debe considerarse un factor limitante sino una demostración de arrojo por parte de ellos. Tampoco quiero apuntar a la inexperiencia por parte nuestra, ya que nuestros jugadores que se ganan la vida como profesionales de esto superan un listón mínimo que garantizan que el grupo –que no equipo- tenía las cualidades necesarias para estar ahí. De hecho, mis palabras no van dirigidas a ellos que se la juegan en la cancha, más bien a los que dirigen la estructura que los arropa.





Como ya mencioné en líneas anteriores, dentro de las cinco primeras clasificadas del Pre-mundial 2009, la selección nacional dominicana es –al igual que la argentina- una de las plantillas de mayor edad: 28 años de media. Pero este dato en sí mismo no es tan significativo como lo es la tendencia, inversa al resto, en cuanto a progresión de edad. Mientras Brasil, Argentina, Puerto Rico y Canadá muestran claramente una evolución post ciclo olímpico (Atenas 2004), República Dominicana registra un comportamiento acíclico propio de la política del “ven tú”, como veremos a continuación.


La generación base de esta Selección de Mayores es la que participó en el Mundial Sub-21 de Japón en 2001, donde quedamos cuartos por detrás de Argentina. Sin embargo solo tres componentes de aquella selección forman parte de la selección absoluta: Luis Flores, Carlos Morbán y Jack Michael Martínez. Cabe hacer el inciso de que en aquel torneo quedamos por encima de la España de José Manuel Calderón, Berni Rodríguez y Carlos Cabezas, los tres Campeones del Mundo en 2006.


El siguiente escalafón de la base sería el grupo que participó en el Torneo de las Américas Sub-21 de 2004 en Halifax, Canadá del cual no contamos con ningún jugador ni en la preselección. Esto último es más fácilmente entendible –pero no excusable- porque en esa época se produjo la explosión NBA de Latinoamérica, ya que en el Pre-mundial 2009 Brasil tampoco contó con ningún participante de esta generación, más si lo hizo Puerto Rico (dos jugadores), Argentina (1 jugador) y Canadá (1 jugador).


Esto son hechos importantes ya que la continuidad de los jugadores dominicanos de la base, que en categorías inferiores (menores de 19 años) a nivel de región ha tenido destellos aceptables, es inexistente a medida que escalan categorías.

La falta de continuidad dentro del Proyecto de Selecciones Nacionales (que le llaman así aunque se enfoca en la Selección de Mayores) provoca una tendencia más peligrosa, y que quizás si fue determinante en este torneo: la falta de rotación y rodaje de los jugadores. Esto choca de lleno a las creencias de que solo basta calidad NBA, ya que no siempre podremos contar con estos jugadores (casos ilustrativos: José Juan Barea de Puerto Rico y Dirk Nowitzki de Alemania).



Y es que, si bien no se duda de la garra y el talento individual, no es un secreto que la sangre fría necesaria en este tipo de citas se consigue con eso mismo, participando en este tipo de citas. La falta de continuidad de la base, la política del “ven tú” y la carencia de un marco ordenado (y por escrito) del compromiso de los seleccionables, a la hora de jugar nos pone en desventaja respecto a los demás. Para muestras, estos botones:
  • De la actual Selección Nacional de Brasil, 6 jugadores participaron en el Pre-olímpico de 2003, 7 jugadores participaron en el Pre-mundial de 2005 y 7 jugadores en el Pre-olímpico 2007. Asimismo, 8 jugadores (incluido el quinteto inicial) de la actual selección han participado en alguna de las tres citas mencionadas, como mínimo.
  • De la Selección Nacional de Argentina, 3 jugadores participaron en el Pre-olímpico de 2003, 5 jugadores participaron en el Pre-mundial de 2005 y 8 jugadores en el Pre-olímpico 2007. Asimismo, 8 jugadores (incluido el quinteto inicial) de la actual selección han participado en alguna de las tres citas mencionadas, como mínimo.
  • Por Puerto Rico, 3 jugadores participaron en el Pre-olímpico de 2003, 4 jugadores participaron en el Pre-mundial de 2005 y 7 jugadores en el Pre-olímpico 2007. Asimismo, 8 jugadores (incluido el quinteto inicial) de la actual selección han participado en alguna de las tres citas mencionadas, como mínimo.
  • De la actual Selección de Canadá, 1 jugador participó en el Pre-olímpico de 2003, 4 jugadores participaron en el Pre-mundial de 2005 y 7 jugadores en el Pre-olímpico 2007. Asimismo, 8 jugadores (incluido el quinteto inicial) de la actual selección han participado en alguna de las tres citas mencionadas, como mínimo.
  • En el equipo de la República Dominicana, 2 jugadores participaron en el Pre-olímpico de 2003, 4 jugadores participaron en el Pre-mundial de 2005 y 3 jugadores en los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2006 (Rep. Dom. no participó en el Pre-olímpico 2007). Asimismo, 6 jugadores de la actual selección han participado en alguna de las tres citas mencionadas, pero solo dos del quinteto inicial indiscutible Francisco García y Luis Flores.

Es hora de que, independientemente FIBA nos invite al Mundial, se comience a planificar la concentración del verano próximo –con los NBA incluidos- para seguir haciendo equipo y comenzar a preparar el siguiente gran objetivo: Londres 2012. Para ello hay que pensar en aglutinar al equipo con mayor antelación, quizás algunos partidos en Europa (que sería deportivamente interesante y económicamente rentable) y establecer el trabajo anual como una cita fija, con independencia del torneo que se vaya a jugar.

Aparte de todo esto, la Federación Dominicana de Baloncesto necesita de una Dirección Deportiva de mayor alcance, que de importancia al baloncesto base y femenino, y de un esquema comercial que rentabilice el interés mediático en la Selección de Mayores y a su vez redistribuya esos recursos a todos los niveles de la estructura deportiva. No basta con las buenas intenciones, y hacen falta más personas capacitadas para llevarlo a cabo.

Nota: el nombre del artículo puede considerarse como un homenaje a los dos únicos jugadores que sin importar el entrenador, ni del torneo que se trate siempre están en disposición de vestir el uniforme nacional.

Rayde Luis Báez
Licenciado en Economía, con Maestrías en Banca y Finanzas, Gestión Deportiva y, Marketing y Comunicación Deportiva.